Prevención de incendios en Edificios de Gran Altura y Análisis de Riesgos
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1 noviembre 2020Como en cualquier edificio, en un Edificio de Gran Altura (EGA), como por ejemplo un rascacielos, se debe realizar un análisis del riesgo y se debe proteger el edificio en base a este análisis: la respuesta será variable ante riesgos variables.
Dicha respuesta deberá cumplir siempre la normativa exigida. No obstante, en este tipo de edificios de características especiales, no sólo se trata de decantarse por un mero cumplimiento legal, pues en ocasiones es escaso, sino que se debe estudiar la solución más adecuada y de mejores prestaciones. Recordemos que estamos hablando de la seguridad no sólo de los bienes, sino también de las personas, por la dificultad que conlleva la evacuación de este tipo de edificios debido a su verticalidad. ¿Qué diferencian los EGA del resto de edificios?
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¿Qué medidas hay que tomar para la seguridad contra incendios?
Evacuación
Son condicionantes las grandes distancias de evacuación descendente, la evacuación ascendente (sótanos técnicos, parking subterráneo), el grado de ocupación, o la diversidad de usos.
Se debe realizar un estudio de la evacuación y dimensionamiento de los medios de evacuación:
- Por etapas o por fases. Para la gestión de la evacuación en fases, debería existir una alarma con megafonía, dirigida desde una sala de control, y existir buena comunicación.
- Hipótesis de bloqueo. Estudiar las escaleras y su capacidad.
Sectorización
Con el fin de evitar la propagación vertical del incendio entre plantas, y la propagación horizontal del incendio en una misma planta:
- Sectorizar cada cierto número de plantas. Planta de sectorización.
- Sectorizar por uso.
- Sectorizar y proteger vías de evacuación.
- Sectorización en patinillos: en horizontal y en vertical.
Resistencia de la estructura
Es vital dotar a la estructura del EGA de suficiente resistencia al fuego para que no colapse, es decir, que los ocupantes del edificio no se encuentren bloqueados en su evacuación y el derrumbamiento de la estructura no afecte a los edificios colindantes, vía pública, etc.
Nuestro Código Técnico de la Edificación (CTE) exige para edificios con alturas de evacuación superiores 28 metros una resistencia de la estructura R180 y que ésta sea uniforme. No sólo se debe proteger la estructura portante y los cerramientos, sino también sellar el paso de instalaciones: conductos de ventilación, tuberías, paso de cables…
Acceso a bomberos
Es importante tener en cuenta el espacio de intervención de los bomberos en el caso de darse una emergencia. Desde nivel de suelo no pueden intervenir, por lo que en algunos edificios se instalan depósitos intermedios de abastecimiento de agua para su uso en caso de incendio.
También se debe estudiar la posibilidad de acceso por fachada, instalación de sistema de columna seca o columnas húmedas, comunicaciones entre sala de control y resto de plantas.
Comportamiento del humo: Efecto chimenea
Otro condicionante de los EGA es el comportamiento del humo, debido a la presencia de viento y presión variables. Además, en los huecos estructurales del edificio, se forman chimeneas de humo, y este humo se comunicaría rápidamente entre las diferentes plantas.
También se debe realizar un estudio en las plantas bajo rasantes (parkings): tener mucha precaución con la ventilación y la evacuación de humos.
Análisis de Riesgos
Foto: https://dpd.aec.es/analisis-de-riesgos/
El análisis de riesgos es, por definición, el estudio de las causas de las posibles amenazas y probables eventos no deseados y los daños y consecuencias que éstas puedan producir.
Históricamente se ha utilizado como una herramienta de decisión en entornos financieros y de seguridad, si bien, es una herramienta que utilizamos de forma inconsciente en nuestra vida cotidiana: desde que nos despertamos, la elección de nuestras acciones viene determinada en función de los riesgos, desde elegir la ropa que nos ponemos (cogemos el abrigo si sabemos que va a hacer frio, o el paraguas si está nublado, ¿Pero por qué? Porque la probabilidad de pasar frío o mojarnos es alta y si se confirma el hecho, las consecuencias no son deseables), hasta la elección de movernos en coche o coger transporte público, dependiendo del tráfico.
Existen diferentes metodologías que desarrollan un método formal para realizar este estudio, algunas reconocidas internacionalmente como Magerit v.3 o la ISO 31000:2018. Es importante seleccionar un método, ya que también por definición un análisis de riesgos formal debe reunir tres condiciones: deber ser objetivo, repetible y comparable.
Independientemente de la metodología escogida se debería comenzar por conocer qué es lo que nos preocupa o sobre qué queremos hacer el estudio (en el entorno de una EIPD, en el ámbito del Reglamento General de Protección de Datos, sería el tratamiento de datos personales), para posteriormente identificar qué posibles eventos podrían suceder que lo pusieran en peligro (identificación de escenarios de riesgos).
Dichos escenarios de riesgos deberán ser analizados en dos sentidos: por un lado estimar la frecuencia de ocurrencia de dicho escenario, y por otro, supuesta la materialización del escenario, qué posibles daños podría ocasionar. Para ello, se deberán establecer criterios de impacto (en el caso de las EIPD, en el ámbito del RGPD, cómo se ven afectados los derechos y las libertades de los individuos) y escalas del daño (por ejemplo: bajo, medio y alto).
La fórmula del riesgo es sencilla: Riesgo = Frecuencia x Impacto. Para ello, normalmente se suelen establecer matrices de riesgo, donde se representa gráficamente dicha relación.
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Ejemplo de matriz de riesgo
El siguiente paso, es evaluar los riesgos e indicar qué riesgos son aceptables y cuáles no lo son, y por lo tanto van a requerir de un tratamiento.
En el siguiente punto, se propondrán posibles acciones para tratar el riesgo. Existen diferentes opciones: acciones dirigidas a reducir el riesgo, ya sea reduciendo la probabilidad o el daño, para evitar el riesgo, trasladar el riesgo a un tercero o, en última instancia, asumir el riesgo.
Esta última acción, debería ser por defecto la última opción, debe ser una decisión de la alta dirección y debe estar justificada.
El último paso consiste en estimar cómo de efectivo se estima que sea el tratamiento, para finalmente calcular el riesgo residual, el cual, debe ser comunicado a la alta dirección y debe ser aprobado por la misma.
Fuentes:
Prevención Seguridad Soler: https://n9.cl/gblwb
QAEC Asociación Española para la Calidad: https://dpd.aec.es/analisis-de-riesgos/
Foto: https://www.elconfidencial.com